DESCUBRE SI ESTÁS PRESENTANDO SÍNTOMAS DE ANSIEDAD EN LA CUARENTENA POR EL COVID – 19

por | Abr 12, 2020 | Uncategorized | 0 Comentarios

DESCUBRE SI ESTÁS TENIENDO SÍNTOMAS DE ANSIEDAD POR EL COVID – 19 Y CÓMO AFRONTARLOS

Cambios importantes en los hábitos alimenticios, en el sueño, en el estado de ánimo pueden ser síntomas de ansiedad. Si estás durmiendo mucho más o mucho menos que lo habitual; si sientes menos o más apetito en estos días; o si estás sintiéndote bajo de nota, triste o con cambios fluctuantes en tus emociones, es muy probable que estés atravesando por una situación de ansiedad asociada a la crisis mundial del COVID – 19.

Lo primero que necesitas saber es que la ansiedad es una reacción natural ante una situación que evaluamos como riesgosa para nuestra vida y nuestro bienestar, sin embargo, es difuso o no es tan claro qué es eso que evaluamos como riesgoso y amenazante. Y aunque las señales de la ansiedad pueden parecerse a las reacciones que presenta nuestro cuerpo ante una situación de miedo, usualmente la intensidad suele se más baja en los síntomas de ansiedad, aunque mucho más largos en duración.

Por lo anterior, es fácil confundir la ansiedad con sensaciones como la de hambre, y/o falta de ella y/o sueño excesivo y/o insomnio y/o irritabilidad, pues la ansiedad se puede sentir en el cuerpo como:

Una leve sensación de incomodidad en el estómago que fácilmente podríamos interpretar como hambre llevándonos a tener el deseo de comer nuevamente justo unos minutos después haber tomado una de las comidas principales como el almuerzo o la cena.
Una sensación de incomodidad en el estómago que podríamos interpretarla como náusea o falta de apetito, sin percatarnos que han pasado muchas horas sin ingerir alimentos.
El deseo de tomar o comer algún tipo de alimentos en mayores cantidades como los dulces, u otras sustancias como el alcohol, el cigarrillo, el café u otros alimentos que generan una sensación de placer por algunos minutos u horas pero que necesitas estarlas ingiriendo de manera reiterativa para mantener esa sensación placentera, pero que sostenida en el tiempo puede terminar afectando tu salud.

Un estado de ansiedad prolongado en el tiempo, usualmente lleva a que nuestro sistema nervioso esté sobreactivado liberando en mayor cantidad «las hormonas del estrés» como el cortisol, la noradrenalina y el glucagón, lo cual de una parte afecta negativamente la capacidad inmune del organismo y de otra parte se asocia con incremento en la tensión muscular, dolores de cabeza, dificultades para dormir (insomnio), o incremento exhorbitante en el número de horas de sueño.

Por lo anterior es importante conocer cómo podemos manejar la ansiedad para evitar que nuestra salud emocional y física se terminen deteriorando de alargarse esta cuarentena. Aquí te doy algunas recomendaciones para que puedas lograrlo:

Lo primero que necesitas es ser consciente del por qué tu mente está viendo esta situación de cuarentena cómo algo amenazante contra tu vida y/o contra tu bienestar. Una forma muy sencilla pero eficaz, es escribir sobre lo que estoy pensando y sintiendo en estos momentos, pregúntate ¿a qué le temes?: ¿a qué te infectes o puedas morir de coronavirus?, ¿a qué algún familiar o ser querido pueda infectarse o morir por este virus?, ¿a qué te quedes sin trabajo?, ¿a que te quedes sin ingresos?, ¿a que te quedes sin comida?, ¿a la incertidumbre frente a cuándo terminará toda esta crisis? etc. Una vez te hayas permitido explorar a profundidad cual es en realidad tu temor o temores, puedas también escribir aquellas señales en tu cuerpo que ahora descubres puedan relacionarte con esta emoción de miedo y/o de ansiedad (sensación constante de hambre, o de falta de apetito, malestar en el estómago, dolor de cabeza, dificultad para quedarte dormido, o cualquier otra sensación que puedas estar presentando. Otra opción sino te gusta mucho escribir es poder conversar de esto con otra persona (evita hacerlo con tus hijos si son niños o adolescentes). Hacer esto, te permitirá hacer consciente muchas cosas que seguramente has estado pensando y sintiendo durante estas semanas de cuarentena pero de manera inconsciente.
Lo segundo que te recomiendo que aceptes eso que estás sintiendo sin censurarlo, y vuelvas a leer lo que escribiste, como si quisieras entender un poco mejor lo que estás sintiendo y estás pensando. Aceptar la emoción o las emociones que estás sintiendo, así como las señales de tu cuerpo, es un paso muy importante en aprender a gestionar tus emociones de manera eficaz.
Luego de esto quiero que puedas hacer un recorrido mental por tu cuerpo y puedas descubrir zonas donde tengas tensión o dolor, y empieces conscientemente a tensionar aún más esa zona y luego con ayuda de la respiración a relajarlo. Esto te servirá para aprender a generar mayor nivel de conciencia sobre cómo tu cuerpo se conecta con tus emociones, y cómo aceptar nuestras emociones en nuestra vida, es una forma mucho más saludable y efectiva de gestionarlas de manera adecuada.
Por un momento quiero que dejes de pensar en todas las situaciones trágicas que podrían ocurrir en esta crisis, y qué te enfoques en contar una historia sobre cómo podrías convertir esta crisis en tu GRAN OPORTUNIDAD de reinventar tu vida en una historia que te emocionaría contarle a tus nietos al cabo de unos años, de lo que hiciste con tu vida en esos días de pandemia casi olvidada.
Tómate el tiempo de escribir qué quieres hacer en estos días de quedarte en casa de manera obligatoria: aprenderás ese idioma que siempre habías soñado aprender; leerás ese libro que siempre habías dejado para luego; pintarás ese cuadro que llevabas años queriendo pintar; escribirás ese libro que las ocupaciones cotidianas te habían llevado a postergar por años; crearás ese emprendimiento que siempre habías dejado sin concluir.

Sueña mientras escribes con todo eso que la excusa de una vida ocupada te había llevado a aplazar indefinidamente. Y luego de que termines de escribir te pido que cierres los ojos y te permitas sentir tu cuerpo, y registres cómo se siente tu cuerpo sólo con el pensamiento de hacer cosas que disfrutas hacer y que ahora esta cuarentena es la oportunidad de convertirlas en realidad, seguramente descubrirás una poderosa fuerza despertando en ti y una sonrisa capaz de convertir en esperanza y oportunidad estos momentos donde debes permanecer en casa.

Asegúrate de concluir tu escrito con una fecha que te rete y te dé la certeza que antes de que finalice esta cuarentena habrás finalizado o por lo menos adelantado de manera significativa.

Muchas veces necesitamos algo que nos rete y nos haga olvidar de nuestras penas y nos conecte con nuestro espíritu creador, y nuestro espíritu de servicio:

Quizá si dejas de pensar en la posibilidad de infectarte y morir, puedas elegir servir dando aliento a los tuyos y escuchando a tus hijos, tu pareja, tus amigos y familiares en una conversación donde puedas escuchar sin afán, sin cronómetro, sólo con el deseo de escuchar lo que él otro tiene para compartirte.
Quizá si dejas de pensar que tienes que ir a fumarte el próximo cigarrillo, ves esta cuarentena como la oportunidad para mover los muebles de la sala y utilizar este espacio para moverte y hacer algo de ejercicio, puedas recuperar el sano hábito de ejercitar tu cuerpo, quizá termines estos días de encierro, con varios kilos menos de pesos y una sensación de mayor vitalidad en tu cuerpo.
De pronto ves en el siguiente dulce que quizá sin tener hambre quieras llevar a tu boca, la opción de sentarte y cerrar los ojos y permitirte durante 15 minutos cerrar tus ojos y ver qué pasa por tu mente cuando estás en silencio y en quietud.
Posiblemente descubras en estos días la oportunidad perfecta para aprender a cocinar o aún mejor para aprender a preparar alimentos que le permitan a tu cuerpo sentirse más vigoroso y sano. Sólo por estos días no tienes que salir despavorido corriendo a tu trabajo o a la primera reunión de la mañana y no llegarás tarde en la noche sin energía para cocinar.
Quizá descubras un profundo placer en no hacer nada, y no hacer nada es diferente de sentarte un día entero frente al televisor o el computador, o quedarse todo un día durmiendo (aunque lo anterior también se vale de vez en cuando).

Seguramente en esta cuarentena termine muriendo un Yo con el que no nos sentíamos tan cómodos, y necesitábamos que dejarlo morir, para que renaciera otra versión de ese Yo, más vivo, más parecido al alma de un niño, con más vitalidad y más energía capaz de valorar la vida y sus días como una increíble oportunidad para aprender, servir y amar.

Quizá terminaste de leer esto, y pienses que es demasiado trabajo, aún queda la opción de que levantes el teléfono y pidas ayuda, hay muchos psicólogos y psiquiatras que estarán listos a recorrer este camino u otro con el objetivo de ayudarte a que la ansiedad no se convierta en una enfermedad tan letal como el COVID-19, asegúrate de hacerlo, antes que la ansiedad desemboque en una depresión, que es un trastorno que año a año mata a muchas personas más que las que a la fecha ha matado este virus en todo el mundo.

Cordialmente,

RICHARD LOZANO
Coach inmobiliario – Coach financiero

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

+57 323 289 4956

gerencia@orus.com.co

Abrir chat
Powered by